El
amor no entiende de nada; nada más que trae problemas, pero quizás
los problemas no me importen si la persona a la que quiero está
conmigo. Puede que a veces decepcionemos a los demás, a personas que
son importantes para nosotros, pero si de verdad nosotros les
importásemos, se alegrarían de que nosotros fuésemos felices, sea
o no con la persona que les importa. Quiero una noche contigo. Una
noche en la que solo estemos tú y yo; en la que el mundo solo sea
una pequeña parte. Quiero una noche a tu lado, en la que nuestros
labios no hagan más que sentirse, en la que nuestras manos se unan
procurándose calor, en la que nuestras palabras prometan un futuro
juntos. Quiero, no una noche, sino toda una vida.